18 marzo 2010
16 marzo 2010
La fuente de la vida....

Tríptico del Jardín de las Delicias, Creación de Adán y Eva del El Bosco, óleo sobre tabla (220 x 97 cm.) del estilo de la pintura Flamenca, (1503) que está en el Museo del Prado.

Esta pintura es el ala lateral izquierda del tríptico, mientras que al otro lado encontraremos el Infierno musical. Las razones de la fama de esta obra es la brillantez imaginativa de El Bosco en los tres paneles del tríptico. En esta escena podemos contemplar una organización que El Bosco repitió básicamente en casi todas sus escenas del Paraíso: en la parte inferior, Dios presenta a Adán la Eva recién creada a partir de su costilla. Ambos representan la pareja ideal de seres humanos, en perfecta armonía y unidad . Y Más arriba está la fuente de la vida, construida con un extraño material rosado que recuerda los caparazones de algunos crustáceos. Pero incluso en el paraíso se encuentra agazapado el peligro, y en el ojo que constituye el cuerpo central de la fuente vemos cómo se asoma una lechuza, símbolo de la herejía. El Edén se encuentra repleto de animales, buenos y malos. Alimañas, sapos y figuras de aspecto demoníaco conviven con unicornios, ciervos, garzas, una jirafa y un elefante, que el Bosco no debió de haber visto nunca en vivo. Unos animales se cazan a otros, pero la sensación de armonía es total. Como un espejo, el otro panel representa la exacta antítesis de este mundo de felicidad y comprensión, al que conduce el panel central, cuando el hombe no se oye a si mismo y se desvia de su camino.
13 marzo 2010
Abrazos ... nanas silenciosas para mecer el espiritu
y sé que estás ahí cuando abarcas mi cuerpo con tus brazos y me llegan tus te quieros.
Son nanas silenciosas para mecer el espiritu.
Calman el desasosiego, y crean un vínculo humano y directo de corazón a corazón.
Sólo hay que pedirlos y darlos.
10 marzo 2010
Hey Bo Diddley! 100% energía. Extraordinario!
Si Elvis Presley es el rey y Chuck Berry el poeta, Bo Diddley es el arquitecto del rock. Una leyenda viva como su gran energía.
(¡Gracias! a esa gran persona que me ha regalado este descubrimiento).
Y como dice Fito: él no es Bo Diddley ("Yo no soy Bo Diddley".
... un mar de fueguitos
Un hombre del pueblo de Naguà,
en la costa de Colombia pudo subir al alto cielo.
A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana... Y dijo que somos un mar de fueguitos.
- El mundo es eso -revelo- Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia
A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana... Y dijo que somos un mar de fueguitos.
- El mundo es eso -revelo- Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia
entre todas las demás.
No hay dos fuegos iguales.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos
Hay fuegos grandes y fuegos chicos
y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno, que
Hay gente de fuego sereno, que
ni se entera del viento,
y gente de fuego loco que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos,
Algunos fuegos, fuegos bobos,
no alumbran ni queman;
pero otros arden la vida con tantas ganas
pero otros arden la vida con tantas ganas
que no se puede mirarlos sin parpadear,
y quien se acerca se enciende.
Eduardo Galeano (El Libro de los abrazos)
Fábulas inimitables, historias poéticas sacadas de la realidad, algunas divertidas, otras conmovedoras, en este libro que destila América por los poros.
y quien se acerca se enciende.
Eduardo Galeano (El Libro de los abrazos)
Fábulas inimitables, historias poéticas sacadas de la realidad, algunas divertidas, otras conmovedoras, en este libro que destila América por los poros.
08 marzo 2010
"La edad de hierro"

"La edad de hierro" es una novela de una belleza rara, diría incluso que existe la extraña necesidad de esta novela" (Jordi Llovet, El País)
Esta como casi toda su obra es dura, amarga y fuerte, despojada de todo adorno y la vez de una sobria belleza en la que imprime el sello de su gran fuerza narrativa.
Narra la vida de una anciana que vive sola en Ciudad del Cabo en las etapas postreras del apartheid. Su hija emigró ya hace algunos años a los Estados Unidos y por eso debe enfrentar sin compañía la noticia de que tiene cáncer. Ese mismo día se introduce en el patio de su casa, un mendigo, quien con su inseparable perro invade las dependencias de su casa, élla no lo expulsa y va desarrollando una extraña relación con él, íntima y ambigua. Ni amigos, ni amantes, ambos se acompañan en una etapa personal e histórica especialmente dura. Este es el hilo conductor que Coetzee hace servir para denunciar la violencia de una sociedad y sus consecuentes miserias humanas.
La Edad de Hierro es así una novela sobre la culpa, pero también sobre el abandono en la vejez y la soledad y que por su temática quizá hunde al leerla aunque después hace subir con fuerza y resurgir como el Ave Fenix, de las cenizas, o desde el fondo.
Desgracia es otra magnífica novela de Coetze, que ganó el Booker Prize.
Blues con Keith Dunn, nuevo CD
Su nuevo y recomendable CD de blues:
http://www.alonewiththeblues.com/bookkeithdunnband/bookband-es.htm
"Keith Dunn Collection"
se puede descubrir en la web de la banda:
http://www.myspace.com/keithdunnband
E igualmente saber sobre éllos en estas otras webs:
http://www.myspace.com/keithdunnmusic
http://www.facebook.com/pages/KEITH-DUNN-BAND/205601471722
http://www.alonewiththeblues.com/bookkeithdunnband/bookband-es.htm
"Keith Dunn Collection"
se puede descubrir en la web de la banda:
http://www.myspace.com/keithdunnband
E igualmente saber sobre éllos en estas otras webs:
http://www.myspace.com/keithdunnmusic
http://www.facebook.com/pages/KEITH-DUNN-BAND/205601471722
Captar la esencia de las cosas en el fluir temporal
Así definió Machado la poesía.
Antonio Machado era simbolista y se tiene que hacer un esfuerzo de comprensión para desvelar el sentido de sus poemas.
Sol de invierno
Es mediodía. Un parque. Invierno
Blancas sendas;
simétricos montículos y ramas esqueléticas.
Bajo el invernadero, naranjos en maceta,
y en su tonel, pintado de verde, la palmera.
Un viejecillo dice, para su capa vieja:
«¡El sol, esta hermosura de sol!...»
Los niños juegan.
El agua de la fuente resbala,
corre y sueña lamiendo, casi muda, la verdinosa piedra.
Antonio Machado era simbolista y se tiene que hacer un esfuerzo de comprensión para desvelar el sentido de sus poemas.
Sol de invierno
Es mediodía. Un parque. Invierno
Blancas sendas;
simétricos montículos y ramas esqueléticas.
Bajo el invernadero, naranjos en maceta,
y en su tonel, pintado de verde, la palmera.
Un viejecillo dice, para su capa vieja:
«¡El sol, esta hermosura de sol!...»
Los niños juegan.
El agua de la fuente resbala,
corre y sueña lamiendo, casi muda, la verdinosa piedra.
El espiritu del silencio
Djivan Gasparyan con su música hace resonar lo más hondo, la esencia de cada uno.
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